La habitación era pequeña pero limpia, y tenía una cama cómoda. Sin embargo, la zona era un poco peligrosa por la noche.

- Limpieza excepcional
- Buena conexión wifi
- Personal amable

- Zona peligrosa
- Ruido del tráfico
- Falta de aire acondicionado

Estuve en este hotel y, aunque tenía luz natural, la zona es realmente peligrosa. Habría esperado un detalle especial por mis dos noches, pero claro, eso parece ser mucho pedir. Además, el hotel prometía mejores comodidades, y solo recibí un ventilador. No sé cómo algunos dan buenas calificaciones aquí, yo apenas puedo.

Mala experiencia por la localidad peligrosa.

Me encantó la calidez de la decoración en las áreas comunes, que me hicieron sentir como en casa. Además, la limpieza era notable, creando un ambiente acogedor y agradable para relajarse después de un día de turismo.

Mejorar el ruido de la calle en las noches.

Las vistas desde el último piso son simplemente asombrosas, especialmente al atardecer 🌅. El personal fue muy amable, pero el baño podría mejorarse un poco en cuanto a limpieza. Buen hotel para explorar París.

Cuidado con la zona peligrosa alrededor.

La ubicación es muy conveniente, ya que estamos a solo 200 metros de la estación de metro Stalingrad, lo que facilita nuestro transporte por la ciudad. La habitación era amplia, con una buena luz natural y estaba siempre limpia. Nos gustó que había un supermercado justo al lado, ideal para comprar algunas cosas rápidas para los hijos.

Sin embargo, la zona puede resultar incómoda por la noche y la limpieza en algunas áreas del hotel podría mejorar.

Increíble! Habitaciones limpias, excelente atención del personal, ubicación conveniente cerca del metro.

La habitación era amplia y cómoda, impecablemente limpia, ideal para descansar después de un día explorando. Además, el área tiene un supermercado muy cerca, perfecto para snacks y bebidas.

Me sentí muy bien, no tengo ninguna queja.

La habitación era amplia, con luz natural y una decoración minimalista muy agradable. La ubicación del hotel es estupenda, a solo unos minutos del metro y con un supermercado al lado. El personal fue amable y educado, contribuyendo a hacer que la experiencia fuera placentera. Sin embargo, las instalaciones estaban en proceso de modernización y eso generó un poco de ruido durante la estancia. Asimismo, la calidad del desayuno podría mejorarse, ya que las opciones eran limitadas. A pesar de estos detalles, representa una buena opción en la ciudad.

Ideal para aquellos que buscan comodidad

El personal fue increíble, siempre listos para ayudar, especialmente cuando pedimos una tetera porque, ya sabes, somos británicos y necesitamos nuestro té. La habitación era limpia y los almohadas eran muy cómodas, me ayudaron a descansar después de un largo día.

No fue barato, pero aún así aceptable.

La cercanía del hotel con la estación de metro Stalingrad es impresionante, a solo 200 metros. La habitación, aunque pequeña, cuenta con un baño cómodo y un buen funcionamiento del Wi-Fi, ideal para ver películas después de un día explorando la ciudad.

El entorno cercana al hotel deja mucho que desear, con un ambiente un tanto desagradable y un olor fuerte en la estación del metro. Durante noches, la seguridad en la zona puede generar inquietud, lo que obligó a optar por Uber en vez de caminar tras las actividades. Además, la limpieza en ciertos momentos no fue la mejor, lo que podría afectar la experiencia en general.

Habitación amplia y cómoda

Disfruté de una habitación amplia y limpia con buena luz natural. La atención del personal fue muy amable, especialmente de un recepcionista que hablaba español. Me gustó que estaba cerca de varias líneas de metro, lo que facilitó nuestra movilidad. Sin embargo, la zona no parecía muy segura, lo que nos hizo optar por Uber para volver al hotel de noche.